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El nuevo Citroën C5 Aircross fue una de las estrellas del último Salón del Automóvil de París, pero llega a una categoría de SUV compactos muy de moda pero también muy concurrida. Aca lo probamos en la versión 2.0 BludHDI 180 EAT8 Shine.
Desde el cese del C6 en 2012 y la aparición de la marca DS, no hubo muchas novedades dignas de la marca Citroën . Una minivan como el C4 Picasso Spacetourer no bastó, y el C4 Cactus no tuvo el éxito esperado en su presentación como "automóvil esencial". Pero la marca de los chevrones vuelve este año a la vanguardia al introducir un nuevo SUV, basada en la plataforma MP2 del Peugeot 3008 , y denominada C5 Aircross.
Con una longitud de 4,50 m, 55 mm más largo que el 3008 y 14 cm más corto que el 5008 y 7 que el DS7 Crossback , este Aicross C5 se ubica en sus dimensiones en el límite superior de la categoría SUV compacta y su competidor más cercano es, sin duda, el Volkswagen Tiguan con sus 4,49 m.
En términos de diseño, el C5 Aircross toma los últimos tips estilísticos de Citroën, pero conservando una personalidad propia. Encontramos las ópticas en dos niveles, pero separados horizontalmente por una barra de color de la carrocería, las çopticas inferiores forman una extensión de la grilla. En los flancos, las áreas acristaladas están acentuadas por un marco cromado, debajo de las puertas incorpora dos pequeñas burbujas de aire, la delantera puede recibir un inserto de color personalizable. Finalmente, la originalidad de la parte trasera reside sobre todo en los cuatro módulos de las luces. Finalmente, reconocemos a primera vista la pertenencia a la marca, pero los pequeños cambios están lo suficientemente presentes como para dar una verdadera personalidad al modelo: es fluido, elegante pero sin agresividad excesiva.
A bordo, el C5 Aircross tiene la pesada tarea de tener que mezclar dos mentes normalmente opuestas: la de un vehículo utilitario y un automóvil familiar. Lo primero es provisto por un tablero de instrumentos con líneas horizontales que solo se ven alteradas por curvas sobre los aereadores y con vistas a una gran consola central que le da un aspecto lujoso al conjunto. Simple, refinado y con un acabado y una selección de materiales favorecedores, incorpora en el centro una serie de pantallas de 8 pulgadas pero también, y es la primera vez en Citroën, una instrumentación digital de 12.3 pulgadas desde su rango medio Pero el SUV no olvida los aspectos prácticos con sus tres asientos independientes en la parte trasera que se pueden replegar o deslizar hasta 150 mm. En la posición más adelantada, las rodillas de los pasajeros permanecen razonables y el volumen del baul es de 720 litros. En el otro extremo de los rieles, el C5 Aircross se vuelve tan espacioso como una limusina y todavía conserva 580 litros de baul.
En términos de equipamiento, el SUV compacto de Citroën está sobre todo lleno de ayudas a la conducción: la marca tiene un total de 20, que incluyen monitoreo de puntos ciegos, reconocimiento de señales, cámara de 360 °, asistente de estacionamiento o Active Lane Keeping y Adaptive Cruise Control con función Stop & Go, estos últimos combinan sus esfuerzos para convertirse en un sistema de manejo de Nivel 2 semi-autónomo llamado Highway Driver Assist. El C5 Aircross también está al dia con la conectividad que se puede esperar de un vehículo hoy en día como la función Mirror AScreen compatible con Android Auto y Apple Carplay, carga de smartphone por inducción así como Connected CAM.
Cuatro motores sobrealimentados están disponibles en el lanzamiento: dos nafteros Puretech, 3 cilindros 1.2 de 130HP y 230 nm y 4 cilindros 1,6 de 180HP y 250 Nm, y dos BlueHDI Diesel, de 1,5 de 130HP y 2.0 de 180HP y 400 Nm. El primero solo está disponible con una caja de cambios manual de seis velocidades, el segundo y el último con automática EAT8 de ocho velocidades estándar y solo al tercero se le ofrece la opción entre las dos transmisiones. Con masas contenídas - por el tamaño - de entre 1404 y 1540 kg, el rendimientos notables ya que la aceleración de 0 a 100 kmh es de entre 8,2 y 10,5 s y las emisiones de CO2 permanecen contenidas, oscilando entre 106 y 129 g / km. Se espera a finales de 2019 la llegada de una versión híbrida recargable de 225HP que también se encontrará en el Peugeot 508 y 3008.
En términos de precios, el Aircross Citroën C5 está particularmente bien: a pesar del hecho de que es uno de los más grandes de los SUV compactos, sino que también es uno de los más baratos de partida a 24.700 € el 1.2 PureTech 130HP, que es inferior en 1300 € al 3008 equipado con el mismo motor, 1 200 € al Renault Qajar 1,3 TCE 140, el Volkswagen Tiguan es mucho más caro: 30610 € el 1.5 TSI 150.
Continúa en: Citroen C5 Aircross. Test - Parte 2  |
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