Fuente: Actualidad Motor.es
Comparativa Peugeot 308 1.6 HDI 1ra generación Fase 1 - Peugeot 308 2da generación
La experiencia es un grado, de eso no cabe duda. Un deportista puede tener talento, puede aprender rápido la técnica, tener capacidades innatas, sentimiento, valor. Pero si no ha pasado por momentos difíciles, si no conoce la derrota, si no ha tirado y ha fallado, entonces no será un jugador completo.
Aprender a aprender, a conocerte, es vital. A veces, para ganar, no hace falta librar una batalla contra el enemigo, sino con uno mismo. Hoy mostramos un ejemplo, hacemos una peculiar comparativa. Cara a cara no estarán distintas opciones del mercado, o los GTI más furiosos. A mi izquierda, el Peugeot 308. A mi derecha, el nuevo Peugeot 308. El pasado y el presente enfrentados en la lucha del tiempo.
Miramos hacia atrás y analizamos el camino recorrido. Para encontrar los primeros pasos, debemos remontarnos a finales de 2007. Un nuevo león, con una estética inspirada en su predecesor. El Peugeot 308 estaba listo para enfrentar el mercado.
Transcurrían los años, y el francés se actualizaba con un modesto restyling, Detalles por aquí y por allá. El compacto seguía siendo prácticamente el mismo. La agresividad bajaba de tono acomodandose a las tendencias, pero la esencia permanecía inalterada.
Y llegó el día. El Peugeot 308 necesitaba renovarse, pero simplemente se transformó en otro auto. Desde su imagen, hasta su personalidad. El león ha pasado de cachorro, a adulto, en un abrir y cerrar de ojos.
La estética se ha pulido. Se dotó al nuevo modelo de líneas suaves, se han esforzado por transmitir limpieza. La parte frontal ya no nos mira con descaro, sino con timidez. Las opticas, antes eran alargadas y afilados, pasan a ser más pequeñas y estilizadas, e incluyen la tecnología LED para las luces diurnas.
Nada queda de esa enorme parrilla con la protección negra recorriéndola. Ahora, dos son las tomas de aire en la parte delantera rodeada de cromados. La nariz que lucía la anterior generación se ha sometido a una operación estética y en el capó, solo quedan algunos nervios para aportar rigidez y estética
Las dimensiones de la carrocería también han cambiado notablemente. El 308 de segunda generación, se basa en la nueva plataforma EMP2, es 4 cm mas bajo, 1 cm mas angosto, y 2 cm más corto, Resultado de nuevas tecnologias..
El paso del tiempo también se nota en un lateral con menos superficie acristalada, y distinta fluidez de líneas. Las ópticas traseras se colocan de forma horizontal con aristas marcadas pero rematadas con suavidad, sin extremos. Un atuendo totalmente distinto, el nuevo 308 es mas discreto pero insinúa mas a la imaginación.
Aunque el exterior a primera vista aparenta haber adoptado un estilo germano, destaca por su elegancia, por su serenidad. Son dos imágenes muy distintas, pero si nos subimos, el interior directamente pasamos a otro mundo. Gran cantidad de funciones se resuelven con la enorme pantalla táctil insertada en el centro del torpedo. Un lugar que toma formas fluidas y huidizas hasta llegar al túnel de transmisión, más elevado y mejor colocado. Y el puesto de conducción ofrece una posición más baja, más deportiva, desde donde posás tus manos en un volante pequeño, con la instrumentación sobre el.
Sensación es de frescura y orden. El anterior 308, ofrecía buenas calidades interiores, además de un diseño correcto. El nuevo, supera ambas cualidades lográndo una atmósfera cosmopolita, adaptada a los tiempos que actuales. Además, el menor tamaño exterior, no repercute en el interior y ademas ofrece un baúl enorme respecto a su antecesor: 420 litros, 70 litros de diferencia.
La gama plantea varias alternativas en cuanto a motorizaciones. Una lista que se ha modificado con la llegada de esta generación y que se ampliará a lo largo del tiempo. La opcion con motor 1.6 HDI.en su versión mas potente (En el momento de la comparativa, ahora el mas potente otorga 150HP) es una de las favoritas por los clientes. Proporcionar un comportamiento equilibrado con consumos contenidos es su valor más destacado. ¿Habrá también evolucionado radicalmente?
La mecánica señalada ha ido sufriendo cambios gradualmente. Cuando la montaba el primer Peugeot 308, desarrollaba una potencia cercana a los 110 HP, hoy, en el nuevo modelo ofrece 115 HP y 16 válvulas, ( 8 el anterior) y un aumento del torque entre otras diferencias, 240 Nm antes y 270 Nm ahora.
Los números, mejoran con los años. Pero, ¿y las sensaciones? El viejo león, esconde bajo la piel el 1.6 HDI 8v de 110 HP asociado a una caja manual de seis relaciones y acabado Sport. Con la evolución pertinente, el nuevo monta el desarrollo del anteriór: 1.6 e-HDI 16v de 115 CV, y contempla la misma caja.
Las capacidades de ambos son similares. Es uno de los pocos apartados donde la estirpe recuerda su legado. El nuevo motor nos deja, eso sí, mayor eficiencia tanto en consumo, unos 5.6 l./100 km de media en la prueba respecto a algo más de 6; como por emisiones, casi 20 g. de CO2 menos por km. En parte debido a que equipa Start-Stop y las normativas también son ahora más estrictas.
El Peugeot 308, desde sus orígenes, ha ofrecido un chasis bastante correcto. La suspensión es firme, y en general segúra y eficiente. El nuevo modelo conserva esta actitud, pero mejorándola y reduciendo el balanceo. El anterior bailaba bien, pero es que el nuevo, da los pasos con más técnica.
Mejor bailarín también gracias a las mejoras en su dirección. Ésta transmite más control, es más directa. Además, una vez que te hayas familiarizado con las dimensiones del volante es un placer manipularlo.
Valiente transformación la que nos muestra la marca del león. Con esta nueva generación, Peugeot aspira a más, busca avanzar en el segmento premium. Ha aprendido de sus errores, ha cambiado de objetivos y el resultado es éste. Más serenidad, más calidad, y más eficiencia a un precio igual de competitivo.
El 308 de 1° generacion no venia con motor de 8 valvulas
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